WhatsApp es una aplicación que casi todo el mundo utiliza al día de hoy. Su utilidad básica es comunicarse con los demás. Sin embargo, también nos ha convertido en adictos al teléfono y a no valorar el momento que tenemos con las personas que compartimos de forma física, ya que estamos sólo pendientes de los grupos o de las personas con las que hablamos por esta mensajería instantánea.
Aunque abusar de WhatsApp es uno de los mayores problemas, no es el único. También lo es la forma en que nos comunicamos por allí..,, ¿te suenan algunas de las siguientes situaciones?
- Ha visto el mensaje pero no lo responde.
- Solo me ha puesto un vale sin emoticono o un Ok muy seco.
- No me ha puesto el emoticono del beso del corazón y me ha puesto el normal.
- Me ha puesto lo buenos días sin más.
- No me ha dado lo buenos días y llevo yo 3 días seguidos dándoselos
- Ni siquiera me ha dado las buenas noches.
Así podría seguir la lista, porque todos tenemos situaciones que no nos pueden sentar bien…
“Un estudio de CyberPsichology ha revelado que la aplicación WhatsApp ha causado un total de 28 millones de rupturas de pareja entre todos los usuarios del mundo. Eso sin contar relaciones de amistades y familiares.”
Pero la cuestión no es el qué ni el cómo…
Lo importante es saber aprovechar esta situación para aprender a conocerte un poco más en esa faceta. Entender por qué te afecta esa situación de esa forma, y que este autoconocimiento te ayude en tu crecimiento personal.
- ¿Por qué te afecta en esa persona y no en otra persona?
- Por ejemplo: ¿Por qué te afecta que una persona esté “en línea” pero no haya contestado a tus mensajes?
¿Tal vez por apego?
Entendemos por “apego” el hecho de que necesitas a esa persona, necesitas que te haga caso y que esté pendiente de ti el mayor tiempo posible. Tal vez lo estoy exagerando un poco, pero en algunos casos suele ocurrir así.
La primera respuesta es fácil, ¡sientes apego hacia esa persona! Si es así, analízalo un momento… ¿por qué te molesta que esa persona no te conteste pero hay otras que podrían pasar días sin contestar que te daría igual?
La segunda respuesta tal vez es algo más complicada de analizar. La respuesta tiene que ver con que sientes que esa persona está valorando o priorizando más a otras antes que a ti, y eso te hace sentir menos…
Bien, el primer paso al menos lo hemos analizado y somos conscientes, pero… ¿y ahora qué?
En mi caso, por ejemplo, el ser consciente de ello me hace bajar la intensidad de mi malestar. Luego acepto que soy así y que es un problema mío y no de la otra persona, y que mi actitud con ella no debe cambiar ni contestarle de mala forma porque tal vez ni se da cuenta.
Tal vez la otra persona estaba en línea porque estaba hablando con un cliente, un familiar, una amistad…
No significa que te quiera más o menos, ni mucho menos significa que tú valgas más o menos que la otra persona con la que estaba hablando…
Sin darte cuenta le das a esa persona el poder de que te valore, y la primera que tienes que aprender a valorarte eres tú. No dejar que el exterior ni las demás personas sean los que te valoren.
Cada vez que te entre ese sentimiento de inseguridad reflexiona sobre que no eres ni mejor ni peor que nadie. Que esa persona te quiere igual, conteste antes, o después tus mensajes.
“Vale Anais, ya lo tengo analizado y aceptado”, ¿pero qué hacemos con ese sentimiento de rabia/malestar?
La primera reacción que nos surge, es pagarle con la misma moneda. Sin embargo, eso no lleva a nada bueno, solo provoca que la relación entre los dos empeore y tal vez la otra persona no sabe ni siquiera porque estás así…
¡Porque encima ni se lo decimos! Quizás la otra persona no sabe qué es lo que nos sienta mal, el ser humano es complejo a veces. Suponemos que la otra persona nos debería preguntar porque estamos de esa forma…
Está muy bien hablarlo pero creo que primero deberías analizarlo y aceptarlo. Dejar que pase un tiempo, y ponerte hacer cosas que te gusten (algún hobby, leer.), con el fin de no darle más importancia.
Luego cuando ya se te haya pasado habla con la persona, verás que la sensación de malestar desaparece del todo.
Este proceso no significa que tengas que reprimir ese malestar, sólo que analizamos mentalmente esa emoción y así hacemos que se desvanezca de otra forma. Puede que en otra ocasión vuelva aparecer ese sentimiento pero cada vez será más leve…
Me gusta comentarte esto porque he estado en los dos papeles, y tanto en uno como en el otro si se actúa mal se enfría la relación, Puede ser que si sois dos personas con dos dedos de frente se pueda hablar y las dos aprendáis de todo esto. Pero todos los casos que observado y algunos que he vivido en primera persona han acabado en tragedia, reproches, malentendidos…
Sé que WhatsApp no es una herramienta de desarrollo personal pero las situaciones del día a día sí lo son, no hace falta hacer un curso. Usando la mente y observándonos un poco podemos aprender mucho de cómo somos realmente.Es verdad que haciendo cursos o consultado a un terapeuta o psicólogo siempre acelera el proceso, pero no es imprescindible.
En general, este tipo de situaciones le pasa a gente que tiene la autoestima baja, que no se valoran, que piensan que los demás tienen que darle el valor porque ellos mismos no lo ven. Se sienten poca cosa y son dependientes de otras personas.
Si te sientes reflejado en estos casos, puedes hacer algunas cosas como…
- Empezar a tomar decisiones importantes por ti mismo.
- Planteate tus propias metas y ve a por ellas.
- Practica actividades en las que este contigo misma.
- Reflexiona sobre que te gusta, no te gusta, cuales son tus valores, que quieres en tu vida y que no quieres en tu vida.
- Participar con tu propia opinión en alguna charla. Incluso tomar la iniciativa de tu grupo de amigos para hacer alguna actividad.
Es común que este tipo de malestares estén relacionados con que el chakra del plexo solar que suele estar bloqueado. También, con gente que tiene algo importante en la casa 7 de su carta natal. O en numerología, se puede identificar con personas en las que se repite mucho el número dos en su tema numerológico.
Las herramientas de autoconocimiento son un acelerador, al menos para mí lo son. Lo que analizo en 1 año o 2 años en base a experiencias, con alguna herramienta de las que utilizo en mis servicios, lo logro en semanas, meses o incluso horas…
Hay muchas formas de auto-conocerse, eso es lo bonito de la vida: que cada uno escoja las herramientas y métodos que mejor le funcionen. Aquí sólo quiero contar mi experiencia y lo que me funciona por si a alguien le puede ser útil en su crecimiento personal y espiritual.
¡Ahora es tu turno! Escríbeme en los comentarios, que formas de analizarte usas tú o qué herramientas has probado hasta ahora y que te han parecido. También que situaciones has podido observar, y qué cualidad tuya has podido reconocer.
Ya sabes que si estás pasando por una situación similar y necesitas ayuda personalizada, puedes escribirme un correo a hola@anaisherreros.com o mandarme un Whatsapp +34 627 89 44 33, y enseguida me pondré en contacto contigo.
¡Hasta pronto!
Anaïs